“Lo que nosotros descubrimos es que p38gamma se activa cuando la célula tiene un estrés. Ese estrés, en algunos casos, es un desencadenante de cáncer hepático ya que va a producir un aumento de la proliferación celular, es decir, que las células se empiecen a multiplicar. Es esa p38gamma que se activa la que controla la proliferación celular, ese aumento del número de células que al final va a desencadenar un tumor”.

Guadalupe Sabio (dcha.) y Antonia Tomás-Loba.